Hoy pienso que es lo que tiene escribir en un blog independiente, y que encima nadie lee. Uno puede escribir lo que le plazca sin tener miedo a la censura. Al menos de momento, porque en un año y medio todavía les da tiempo a crear un consejo regulador de blogs, como el que quieren montar para las televisiones.
Esto viene a cuento de que he oído a Carlos Herrera, contar, a modo anecdótico, que el otro día escribió un artículo para El País, previo encargo, sobre la Ley antifumadores, y que para su sorpresa, nunca fue publicado.
Según él, cuando vio que el artículo no aparecía el día señalado mandó un mail a la editorial y que tan sólo obtuvo una contestación explicándole que el motivo de la censura se debía a que "había inexactitudes en el texto".
Desde luego, Carlitos, ¿en qué mundo vives? No te tenía por un ignorante ni por un cándido, pero, ¿de verdad no sabías que no bailabas con la más fea ni con la más guapa, sino con la única? A estas alturas deberías conocer a este periódico, al igual que el Grupo editor al que pertenece, y que es él quien ostenta la plena sabiduría y, por tanto, el don divino de saber qué opiniones son certeras y cuáles no. Y aún mejor, este gran grupo sabe discernir perfectamente entre las informaciones y opiniones que deben llegar al ignorante pueblo y cuáles no deben salir a la luz por pendencieras y porque, por su inexactitud, pueden dañar a los pobres e indefensos ciudadanos.
Seguramente tu artículo estaba lleno de inexactitudes, inexactitudes que podrían incitar a la gente a tener una opinión contraria a la correcta. Y eso no se puede permitir, ya que, al igual que en el mundo de Bradbury, leer puede impedir la felicidad.
Por suerte, tenemos a estos bomberos, que, como Guy Montag, queman esos libros que llenan de angustia, y que ponen en peligro la igualdad, ya que al leer artículos como el tuyo, los hombres corren el peligro de empezar a ser diferentes y lo que es peor, a pensar por sí mismos.
Carlitos, tus artículos no gustan y no venden... o al menos no deberían, así que si no vas a escribir sobre las bondades de ZP o el último rollito de la prima del sobrino del torero de turno, ahórrate el esfuerzo y vuelve con tus fósforos que aunque no sepamos bailar, nos gusta leer y escuchar, aunque no siempre estemos de acuerdo en todo.
habría que leer el susodicho artículo.quizá contenía alguna inexactitud...
ResponderEliminarSi pero supongo que lo correcto es indicárselo al autor y ver si efectivamente se trata de una inexatitud o una "molesta ironía a lo carlitos"
ResponderEliminarUn artículo de opinión siempre contiene inexactitudes, porque la opinión es solo eso, un mero pensamiento, tan exacto o inexacto como subjetivo.
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