martes, 12 de julio de 2011

El fútbol se lo robaron a la gente.

Hoy pienso que me manda un gran amigo, casi hermano diría yo, una entrevista que publicó El País al gran César Luis Menotti hace unas semanas.

Para todo aquel que lo conozca, la entrevista sólo es más de lo mismo. Para el que no lo conozca y por tanto sea un agnóstico del fútbol, igual descubre que este deporte desprende también un lado tan romántico como mágico.

El "flaco", como le apodan en su argentina, es un viejo sabio, pero no por sus 72 años, porque en realidad siempre lo ha sido.

Su historia es extensa, comenzó como jugador, y ya como entrenador triunfó en su tierra, y consiguió el sueño de cualquier argentino, hizo campeona a su albiceleste en el mismísimoMonumental. Sin embargo, cuando cruzó el charco, no tuvo tanto éxito, o mejor dicho, no se lo permitieron, lo cual dice mucho de él y de su forma de entender el fútbol. En el Calcio italiano duró tan sólo 8 jornadas y en España, Jesús Gil lo echó a mitad de temporada y eso que le metió al eterno rival un 4-0 en pleno Bernabeu.

El único equipo europeo que lo entendió fue el Barca donde estuvo tan sólo 2 años y aunque el primer año ganó tres títulos, el siguiente no ganó nada, y prefirió volver a casa, a pesar de que Núñez trató de hacerle cambiar de opinión con un cheque en blanco encima de la mesa.

Ahora, casi 30 años después, recuerda su forma de jugar en el Barca, similar al actual de Guardiola, con un Maradona de 9 y remando por las bandas Carrasco y Marcos junto a un Schuster haciendo de Xavi... ¿o es Xavi el que hace de Schuster?

Se queja de que le pitaban por tratar de tocar la pelota... supongo que luego llegó Cruyff y ahora con Pep, por fin el buen catador culé ha aprendido a apreciar el juego por encima del resultado.

Como buen romántico también tenía su enemigo futbolístico, dentro y fuera de la cancha, el gran Bilardo, un entrenador resultadista que cuenta, entre sus hazañas, con regañar a uno de sus jugadores por darle agua a un contrario y al masajista por preocuparse del estado de otro..."al enemigo ni agua, al enemigo pisálo, pisálo".

No sólo era una forma distinta de entender el fútbol, sino la propia vida, y por eso, como enemigos íntimos, mientras Bilardo explicaba que para él "el fútbol profesional es ganar y solo ganar. Yo soy como Muhammad Ali: durante la competición no tengo amigos, y a los contrarios, si puedo los mato y los piso", Menotti se deshacía en elogios hacia su enemigo íntimo "el fútbol es tan generoso que evitó que Bilardo se dedicara a la Medicina".

El Flaco, en cambio, explica que cuando empezó a jugar "teníamos prohibido gritar un gol de penal, porque un gol de penal lo hace cualquiera"

Todos aquellos que criticaban a Bilardo entonces, parecen no tener memoria y hoy aplauden a un entrenador que se dedica a montar espectáculos dentro y fuera del campo... ellos defienden que ganan partidos, pero les guste o no, al final ese fútbol no enamora y eso para los románticos también cuenta.

"Me sorprenden esos técnicos que llenan cuadernos de notas durante los partidos. Pagaría millones por leerlos. ¿Qué anotarán? La hora del dentista de la hija, qué programa de televisión deben ver durante la semana…. ¿Qué sé yo? No lo entiendo, la verdad"

Pero el sabio no sólo sabe de fútbol, opina de los profesores y dice que si son buenos, influyen enormemente, al 99%. Pero "si eran malos, una mierda. Odié las matemáticas porque durante tres años me amargaron la vida tres profesoras a cual más idiota... Pero me enamoré de la química porque el profesor llegó el primer día fumando, llenó el pizarrón de fórmulas y nos dijo: "Esto se lo tendrían que aprender para el martes. Pero es imposible". Y nos dijo: "Esto es para que sepan que la vida es como la química: hay que interpretarla".

También se atreve con temas controvertidos como la homosexualidad: "Yo no me casaría con un homosexual, pero me dejaría operar del corazón por un homosexual"

Y como no, nos deja una enseñanza para que la apliquemos todos en la vida... "El fútbol es como la vida, no te levantas a las seis de la mañana y te pones a buscar a la mujer de tu vida"

Quizás Bilardo lleve parte de razón cuando dijo que "Menotti es un rabanito, rojo por fuera y blanco por dentro", pero en cualquier caso, un rabanito romántico al que admirar y comprender.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

De lo poco bueno que dejó Bilardo a los futbolistas fue esta frase:
"Yo no estoy de acuerdo con que los futbolistas no tengan relaciones sexuales antes de los partidos...mientras las mujeres sean las que estén encima todo estará bien".
Un gran amigo
PD: Debería ser válido para el futbolista aficionado también, no solo para el profesional. ¿Verdad?

pino dijo...

Y para los no aficionados también!!