"Entonces los discípulos fueron e hicieron como Jesús les mandó. 7 Trajeron el asna y el pollino; pusieron sobre ellos sus mantos, y él se sentó encima. 8 La multitud, que era muy numerosa, tendía sus mantos en el camino; otros cortaban ramas de los árboles y las tendían en el camino. 9 Y la gente que iba delante y la que iba detrás aclamaba, diciendo: «¡Hosana al Hijo de David! ¡Bendito el que viene en el nombre del Señor! ¡Hosana en las alturas!"
Mateo 21:1-11
"Los que pasaban por allí lo insultaban, moviendo la cabeza. 40 y diciendo: Tú, que destruyes el templo y en tres días lo reconstruyes: sálvate a ti mismo, si eres Hijo de Dios, y baja de la cruz. 41 Igualmente también, los sumos sacerdotes se burlaban de él, juntamente con los escribas y los ancianos, diciendo: 42 Ha salvado a otros y no puede salvarse a sí mismo. Es rey de Israel: que baje ahora mismo de la cruz, y creeremos en él. 43 Tiene puesta su confianza en Dios: que Dios lo libre ahora, si tanto lo quiere, puesto que dijo: Soy Hijo de Dios. 44 De la misma manera, también los ladrones que habían sido crucificados con él lo insultaban"
Mateo 27:39-44
Hoy pienso que han pasado más de 2000 años, el hombre ha aprendido a volar, ha conquistado la luna y hasta ha inventado el aire acondicionado (el mejor invento de la historia por delante de la rueda, al menos si vives en Andalucía) y sin embargo, seguimos igual de borregos que entonces.
Viendo ayer las imágenes de Isabel Pantoja saliendo del Juzgado, me vino a la mente la escena de Jesús, subiendo la cuesta camino del Monte Calvario, con esa chusma llena de rabia y odio que escupía e insultaba seguramente sin ni siquiera saber por qué... porque esa gente era la misma que hacía sólo unos días le ensalzaba y le idolatraba como el hijo de Dios... y sin embargo, ahora, por moda o por inercia, seguían gritando su nombre, pero con un sentido bien distinto.
Isabel Pantoja, la que fue viuda de España y durante años la musa de coplas de España. No había fin de año en que no la viésemos cantar después de las uvas. Sin embargo, llegó él, Julián Muñoz y su bigote, ¿que qué vio ella en él? Imagino que esos pantalones hasta arriba dejando el bulto marcado a un lado de la entrepierna, dándole ese aire torero que ella tanto echaba de menos.
Y hoy, tras años de declive artístico, persecuciones paparazzeras, peleas televisivas en horario prime time, muchos "dientes dientes" y sobre todo, un proceso judicial algo más serio que una simple demanda por calumnias, Isabel Pantoja fue definitivamente devuelta a la realidad. Fue muy representavivo oir su nombre al hacer pública la sentencia: Maria Isabel Pantoja Martín. Imagino que ni ella misma escuchaba su nombre desde que era niña, por lo que el impacto debió ser mayor incluso que escuchar seguidamente los dos años de cárcel que el Tribunal le imponía.
Sin embargo, merecido o no, el castigo fue impuesto, y ahí dejo el debate, para que en las peluquerías se trate y finalmente sea Jorge Javier Vázquez quien dicte la sentencia de la calle. Sin embargo, tras ver las imágenes de Isabel Pantoja saliendo del Juzgado de Marbella, insultada, zarandeada e incluso agredida,
pensé que no tenemos remedio. Así somos y así moriremos.
Al igual que Jesús, Isabel pasó de heroína a villana de la noche a la mañana, y lo peor es que aquellos que ayer trataban de lincharla, eran los mismos que hace unos años votaban a Jesús Gil, cacique marbellí y verdadero origen y causa de todos los males malayos.
Lo peor es que yo no me libro, lo reconozco, a los pocos minutos, interrumpiendo mi reflexión pude ver a Oriol Puyol llegando al Juzgado, sonriente y flanqueado por algún amigo del partido, mientras se deleitaba, con sonrisa socarrona, escuchando gritos en su contra de algunas personas que, sin embargo, estaban, éstos sí, bien escoltados por la policía para evitar males mayores.
Y yo allí, frente al televisor, pensando en voz cada vez más alta: "A Barrabás, queremos a Barrabás..."
2 comentarios:
Pues yo la hubiera lapidado!
Qué tire la primera piedra quien esté libre de culpa... en eso es lo que pienso yo cuando veo las imágenes y leo el comentario anterior...
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