Hoy pienso que no creo en la suerte ni tampoco en el azar, porque como decía Voltaire, el azar es una palabra vacía de sentido ya que nada puede existir sin la causa.
Pero sí creo en las rachas, porque son inevitables, como en el fútbol, donde un delantero tiene fases y todo lo convierte en gol y otras veces no le entra un balón entre los tres palos ni empujándolo con la mano.
Yo he tenido una racha extraña. No quiero calificarla de mala, porque no sería justo, pero sí es cierto que una serie de acontecimientos me han sobrevenido y no sé hasta qué punto he sabido lidiar con ellos. Personas que te defraudan, otras que te sorprenden, algunas que quieren despedirse, hechos inesperados, algunas obligaciones que, aún sabiendo que tienes que hacerte cargo de ellas, te sobrepasan...Y ante todo ello tu mente reacciona, se ofusca, se colapsa y se seca.
El mal genio usurpa tu sonrisa, las viejas heridas te saludan, la desidia se adueña de ti y comienzas a encerrarte en tu mundo, ese donde estás tan cómodo pero a la vez tan perdido.
Es en ese momento cuando las musas no te conocen, quizás se avergüenzan de ti y te abandonan. Y entonces sucede, el blog se alimenta de telarañas y deja de pensar que.
En momentos así, es cuando uno debe levantarse, abrir las ventanas, mirar el atardecer y respirar aire fresco.
Para mi ha sido fácil, nada mejor que haya una persona que abra la ventana por ti y de un pescozón te siente delante. De pronto miras el paisaje, y redescubres ese maravilloso paisaje que a veces nos negamos a admirar. Y es que hoy he recibido este mensaje:
Echo de menos "Hoy pienso que"
"Hoy pienso que... no tengo tiempo para nada. Pero hoy pienso que pienso. Unas nimiedades como unas discusiones, unos suelos, unos bancos me van a hacer perder mis cosas realmente importantes. Salir con mi mujer, darle un beso de bienvenida y de despedida, salir con mis niños para que disfruten y aprendan, correr y aprovechar para pensar y luego escribirlo con mi pluma.
Quizás pienso abuso del dedo... del que aprieta un aparato que quizá me esté quitando tiempo y pensamiento. ¿Quizás? No, seguro.
Por supuesto que esas nimiedades también son importantes pero son transitorias y seguro que son superadas, porque las cosas que se hacen con honradez y corazón son superadas. Sólo es cuestión de tiempo.
Así que ya se arreglarán.
Mientras tanto voy a dilatar mis coronarias con un paseo con mi mujer y mis niños, con mi carrerita y con mi pluma... Hoy pienso que..."
Pues eso, seguiré luchando por lo que creo, porque sé que nunca podré escapar de mi espíritu quijotesco, y estoy seguro que volveré a tener rachas extrañas e incluso malas rachas, pero prometo tratar de abrir la ventana cuando no sienta el aire, respirar hondo y admirar, disfrutar...y pensar, para que mis musas jamás me abandonen y mi pluma nunca se seque, y así, conseguir que nadie extrañe "hoy pienso que", pero por encima de todo, que nadie me diga que me echa de menos...
PD. Aún así sé que siempre habrá alguien que me abra la ventana... !gracias!
1 comentario:
¡¡¡Resiliencia!!!
El sueco.
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